Con las negociaciones un tanto bloqueadas y la empresa insistiendo en las causas productivas para plantear el ERE para 335 trabajadores en la planta de Bridgestone en Basauri, el comité de empresa insiste en que la dirección de la multinacional japonesa no ha presentado plan industrial de futuro para la planta. Es la exigencia que han trasladado en los micrófonos de ONDA VASCA el presidente del comité de empresa Roberto Corral y Luis Escalona, secretario del comité.
"Una empresa con 1.800 millones de euros de beneficio el año pasado no se puede permitir un drama en despidos. Eso lo tenemos muy claro", afirma Luis Escalona. Así que viendo estas cifras cuesta entender que se planteen despidos. La empresa alega una caída del mercado europeo tanto en en el sector de camión y autobús que se hace en Basauri como en el mercado agrícola que le toca a Puente San Miguel una caída de las ventas. Entonces, los inventarios se le disparan y esa es la causa que alega", explica Roberto Corral.
"Vendemos menos y por lo tanto tengo sobrecapacidad de producción en las plantas europeas. Y esa sobrecapacidad de producción pues parece que lo quiere solucionar con las plantas españolas ya que somos más caros que la planta de Polonia", añade.
Ahora bien, esa caída de ventas que es un hecho objetivo tiene matices como explica Luis Escalona. "Si entras a analizar un poquito más en profundidad te das cuenta de que lo que existe en realidad es una retirada del mercado de Bridgestone, de un determinado mercado, el de neumáticos de camiones y autobuses en este caso, que es el que hace Basauri", afirma.
En este sentido asegura que la dirección se quiere centrar en la gama premium "que es donde más rentabilidad saca" aunque es en la gama baja y media donde hay crecimiento. "Es deliberado", señala. "No es una empresa que le esté yendo mal, sigue habiendo beneficio", insiste. De ahí que, defienda, no pueda conllevar una "medida tan traumática como unos despidos así con 20 días de indemnización por año".
Volumen de producción
Por eso quieren una negociación en la que se definan las salidas en buenas condiciones pero también que la plantilla que se quede lo haga con buenas previsiones. Y ahí es donde centran parte de su preocupación. "Polonia se lleva la mayor parte de la producción por unos costes más baratos, entonces los que nos quedemos que sea con un futuro, porque si no, con los datos que nos han presentado nos quedamos en peor situación de cara a a futuras producciones", advierte.
"Estamos ante un clarísimo ejemplo de deslocalización", aclara Roberto. "La preocupación que tenemos es la viabilidad de la planta porque al final nosotros hemos llegado a ser más competitivos que Polonia en 2023 teniendo un volumen de producción alto", explica. "Si nos quitan ese volumen y nos dan menos volumen de producción que a Polonia, pues es mucho más difícil que compitamos en cuanto a un indicador que ellos siempre nos lo ponen como referencia que es el coste de conversión, que es lo que cuesta convertir la materia prima en una rueda. Si a nosotros nos quitan volumen es muy difícil que llegamos a competir con Polonia", puntualiza
En este sentido Luis recuerda que esta fábrica de Basauri, una fábrica vasca con mejores condiciones salariales ha llegado a ser "más productiva y competitiva en coste que una fábrica de Polonia, teniendo en cuenta que además nuestra fábrica tiene 92 años y la fábrica de Polonia se se inauguró en 2006", matiza. "Eso dice mucho de la viabilidad de nuestra fábrica, que ha sido galardonada como la más productiva de la compañía hace poco", subraya. Si bien, insiste, en la necesidad de volumen. "Si se nos quita volumen de producción, nos morimos", advierte.
La dirección de Bridgestone ha planteado el despido de 335 trabajadores, el 40% de la plantilla. "No es un cierre, pero en la práctica sí, o sea, lo queremos enfocar así porque además quedaría tocada de muerte, la planta con la productividad bajo mínimos", añade.
Reunión el 24 de abril
Tras varias reuniones de la mesa negociadora, las partes volverán a verse las caras el 24 de abril. La dirección planteará un plan de recolocación externa, algo a lo que están obligados en un procedimiento de este tipo. "Es algo que ya vivimos un proceso en 2012 de despidos también y también hubo un plan de recolocación que luego no se cumplió", recuerda Luis.
"La industria se está desmoronando en Euskadi cada vez más y hay que tener en cuenta que es un perfil de trabajador. Es un trabajador que lleva 30 años en una fábrica con una maquinaria muy concreta. No es un oficio como, no sé, albañil o soldador. Son gente que está muy bien formada en lo que tiene que hacer, pero con máquinas muy concretas", explica.
"Es bastante difícil el recolocar este perfil de trabajador con la edad media que hay en la fábrica, además, que rondará los 50 años", añade. "A día de hoy la la empresa tampoco ha llegado a ofrecer recolocaciones en otras plantas, que también podría ser otra opción", apostilla Roberto.
"En Euskadi tenemos un problema de desindustrialización, se está sufriendo los últimos años y esto es otra más", lamenta Roberto. "Creo que también las administraciones deberían de entrar un poquito a valorarlo", señala. "Estamos esperando a que a que volvamos a tener otra reunión con las instituciones que que nos la prometieron", destaca Luis que subraya el hecho de que la empresa prometiera al Ayuntamiento y Gobierno vasco una reunión con la dirección europea y al final mandó a la responsable de comunicación. "Evidentemente pues aquí se tiene que sentar es es otra persona, no no la jefa de prensa", señala.
Seguirán luchando
Tanto Roberto como Luis han dejado muy claro que van a seguir luchando y que todas las plantas, Basauri, San Miguel y Usansolo están unidas. Se espera que además se sume Burgos. "Da una idea del calado que ha dejado en la plantilla el anuncio. Realmente la gente está pensando o puedo ser despedido o si me quedo, tampoco veo que tenga mucho futuro esto, entonces hay que pelear", destaca Luis.
Y es que aunque se esperaban alguna medida, este ERE les ha sorprendido sobre todo porque hace 2 años tenían un plan de expansión industrial que planteaba pasar de 5.000 neumáticos al día a 6.500 e incluso se proyectaban 8.000. "Ha entrado otra dirección y y ahora se han cambiado las tornas. Así que claro, la sorpresa sí es mayúscula", afirma Luis.
A pesar de todo, Roberto y Luis afirman que siguen siendo "optimistas". "Creo que es momento de que seamos optimistas y que sigamos en el camino que estamos. Creo que vamos bien", subraya Roberto. "Yo soy muy optimista, la plantilla está super concienciada, estamos en unidad sindical, tenemos muy claro los objetivos. Las fábricas son muy competitivas, o sea, una fábrica no está 92 años porque haga las cosas mal, lo tengo clarísimo", añade Luis. "Tenemos que llegar a un buen acuerdo, lo tengo clarísimo", sentencia.